Se han convertido en uno de los productos estrella de los bancos y también es lo que encontrarás con un buen asesor financiero. Hablamos de las carteras gestionadas de fondos de inversión, lo que se conoce como gestión discrecional de carteras.
Bajo esta modalidad, el inversor cede a la entidad financiera o al asesor la gestión absoluta de su dinero. En otras palabras, delega todas las decisiones de inversión, desde qué fondos elegir hasta cuándo y cómo invertir. Por eso se llama asesoramiento gestión discrecional, porque los movimientos son a discreción del asesor.
Lo único que haces como inversor es poner tu dinero y tu nombre. Y es que las inversiones y todos los fondos o activos que se contraten, estarán a tu nombre. Esa es una de las diferencias con los fondos perfilados.
CAJA – Es fácil confundir las carteras gestionadas con los fondos perfilados y con una cartera asesorada. La principal diferencia con el fondo perfilado es que con esa opción, contratas un único fondo de fondos que aglutina todo el resto de inversiones.
Con una cartera gestionada, inviertes de forma individual en todos y cada uno de esos fondos (el asesor lo hace por ti). Esto se traduce en una mayor transparencia, costes más recudidos y comisiones más claras.
Mientras, la diferencia entre las carteras gestionadas y asesoradas, es que con las primeras el asesor invierte por ti, se encarga de todo el proceso, desde comprar hasta vender. Con una cartera asesorada, el asesor financiero solo te aconseja qué hacer. Después tendrás que ejecutar tú la orden de compra y de venta.
Las carteras de fondos gestionadas tienen muchas ventajas y son idóneas si quieres que un profesional se encargue de tus inversiones. Sin embargo, también hay cosas que no te cuentan sobre ellas o que no se explican adecuadamente. En este artículo te descubrimos esos secretos ocultos.
ÍNDICE
El banco INVIERTE POR TI
Esta es la principal característica de la gestión discrecional de carteras de inversión. La entidad financiera se encarga de todo e invierte por ti o, en su defecto, tu asesor financiero.
Eso sí, aunque un asesor o el banco invierta por ti, todos los activos están a tu nombre de forma directa y no de manera indirecta, como con los fondos perfilados.
👉 Este producto tiene también sus propios entresijos. Aquí puedes ver cómo funcionan de verdad los fondos perfilados.
Son tan buenas como los PROFESIONALES QUE HAY DETRÁS
Esto es algo que debes tener muy claro: una cartera gestionada será tan buena como el gestor que la lleve. Así de simple.
Esto incluye todo lo relacionado con la cartera, desde la rentabilidad hasta la composición y, por supuesto, los gastos.
⚠️Cuidado con el asesoramiento porque no todo es igual. Mira aquí lo que no te cuentan sobre los asesores financieros.
Hay asesores que personalizan más sus carteras, que solo usan fondos de clases limpias (sin retrocesiones), que cobran específicamente por su asesoramiento… En definitiva, que son independientes. Y otros que, simplemente, no lo son.
Todo eso tendrá su reflejo en el servicio de gestión discrecional y, por supuesto, en la cartera gestionada. Y lo mismo ocurre con la pericia y experiencia de quien mueva tu dinero.
No siempre son CARTERAS PERSONALIZADAS
Una de las ventajas de la gestión discreción es el mayor grado de personalización, por lo menos en teoría. Y es que, este tipo de servicios van siempre acompañados de un asesoramiento inicial.
La razón es que el asesor, sea independiente o del banco, necesita conocer tu perfil como inversor para poder invertir tu dinero por ti. A partir de ese perfil construirá tu cartera de inversión, adaptada a tus necesidades, objetivos financieros, capacidad de ahorro y situación patrimonial.
En teoría, será una cartera personalizada, exclusiva para ti. La realidad es diferente y no todos los asesores trabajan con carteras personalizadas. Muchos servicios de gestión discrecional utilizan carteras prediseñadas para diferentes perfiles (moderado, conservador, agresivo…).
El mejor ejemplo son los roboadvisors, que disponen de diferentes carteras prediseñadas en las que invertir según el tipo de cliente. Estos, por lo menos, no esconcen lo que hacen y cómo trabajan. Otros asesores y gestores financieros sí.
🙋♂️El hecho de utilizar carteras perfiladas no es intrínsecamente malo o negativo. La realidad es que una cartera 100% personalizada no siempre aporta valor real y para la mayoría de inversores bastará con una cartera bien perfilada.
Muchas incluyen solo FONDOS DEL BANCO
Este es un mal hábito que las carteras gestionadas y los fondos perfilados de los grandes bancos comparten. Es la versión de la autocartera llevada al ámbito de los fondos de inversión.
Buena parte de la gestión discrecional de la gran banca se cimenta en fondos de la propia entidad, que no siempre están entre los mejores ni entre los más baratos.
Con los asesores financieros ocurre algo parecido, solo que en este caso lo que hay que vigilar no es que usen fondos del banco. En este caso hay que poner atención a la clase de fondo de inversión que usan y si se trata de una clase limpia o con retrocesiones.
📌 Las retrocesiones son comisiones que determinados fondos pagan a entidades y asesores para que comercialicen sus productos. En realidad, lo que hacen es compartir una parte de su comisión de gestión con el asesor o el banco como incentivo para que venda su fondo y no otro.
Costes y comisiones MÁS TRANSPARENTES
La estructura de costes y comisiones de las carteras gestionadas es más transparente que con un fondo perfilado e incluso que con un fondo de inversión al uso.
El motivo es que las comisiones de gestión son explícitas. Se cobran aparte y no se descuentan del valor del fondo, como ocurre con un perfilado. De hecho, esa labor de gestión incluye IVA.
Además, como todos los fondos están a tu nombre, podrás consultar en todo momento las comisiones y costes que tienen.
Esto hace que todo lo relacionado con las comisiones sea más transparente y, normalmente, más barato. Los asesores financieros realmente independientes solo trabajan con clases limpias de fondos, lo que supone un ahorro en comisiones respecto a los productos de la banca tradicional.
LIQUIDEZ, pero no inmediata
Con una cartera perfilada podrás recuperar tu dinero en cualquier momento, pero con uno o varios días de diferencia desde que das la orden hasta que se ejecute.
Esto es algo común a toda la industria de fondos. Con una cartera gestionada simplemente tendrás que sumar el tiempo que el banco tarde en dar la orden.
Más difícil COMPARAR
Un fondo perfilado no deja de ser un fondo de inversión con su código ISIN y un valor liquidativo que se calcula a diario (normalmente). Con una cartera gestionada no ocurre lo mismo porque no tiene valor liquidativo. Es la suma del rendimiento de los fondos y del recto de activos que la componen.
Todos los gestores y asesores comunican al cliente cuál es el rendimiento de la cartera, pero no hay listados ni rankings o herramientas para comparar unas con otras. Por supuesto, hay bancos como EBN Banco que sí publican estas cifras, igual que algunos asesores, pero la mayoría no lo hace.
El resultado es que comparar el resultado de una cartera gestionada con otra es complicado. De hecho, hasta dar con el rendimiento de la que tiene contratada sería difícil para el inversor particular por su cuenta y sin la ayuda del asesor.
LÍMITES DE ENTRADA elevados
El servicio de gestión discrecional de carteras suele tener límites de entrada elevados y no aptos para todos los bolsillos. Los hay que empiezan por 20.000 euros, pero también quienes solicitan 50.000 euros de entrada. Si te planteas qué hacer con 10.000 euros, puede que estén fuera de tus posibilidades.
La excepción la marcan los roboadvisors o gestores automatizados de inversión. Este tipo de asesores apuestan por la inversión indexada con comisiones muy reducidas y carteras perfiladas. Se trata de una buena opción para empezar, pero que también tiene sus secretos. Aquí puedes ver cómo funciona de verdad la inversión indexada.