¿En qué se parecen Amancio Ortega, Bill Gates, Warren Buffet y Carlos Slim? Seguro que lo primero que te viene a la mente es que todos son millonarios y que forman parte de la Lista de Forbes de las personas más ricas del planeta. Efectivamente, todos cuentan con grandes fortunas y mucha libertad financiera, pero también comparten una serie de hábitos básicos que son los que les han permitido llegar donde están.
Como suele decirse, el hábito hace al monje, también cuando se trata de dinero. Estos son los hábitos de la gente con mucha libertad financiera que los diferencian de la mayoría de personas.
ÍNDICE
- 1 Son conscientes de su situación financiera y viven dentro de sus posibilidades
- 2 No se endeudan si no es para generar valor
- 3 Tienen muy claro el valor real del dinero
- 4 Piensan, pero también actúan
- 5 Tienen objetivos claros
- 6 Sueñan a lo grande
- 7 Dedican tiempo y recursos a formarse
- 8 Escuchan más de lo que hablan
- 9 Piensan a largo plazo
- 10 Cuentan con personas que les ayudan
Son conscientes de su situación financiera y viven dentro de sus posibilidades
La principal característica de unas finanzas personales sanas es gastar menos de lo que se ingresa y esto es algo que las personas con libertad financiera cumplen a rajatabla. Esta es la fórmula básica para alcanzar la libertad financiera, una regla de oro que ningún millonario o persona con buena salud económica se saltará.
Pueden darse casos o periodos concretos en los que los gastos se equiparen a los ingresos e incluso los superen, pero será algo coyuntural y no estructural.
En otras palabras, uno de los hábitos de los millonarios es que viven dentro de sus posibilidades e incluso por debajo de ellas. ¡Y no porque no puedan permitírselo! Lo hace porque saben lo importante que es la libertad financiera para poder ser ellos mismos.
😀 Una de las ventajas de la libertad financiera es que te permite gestionar tu tiempo, ser más tú mismo y menos lo que dicta el dinero.
No se endeudan si no es para generar valor
La sociedad actual fomenta la deuda como forma de vida. Financiación barata y de fácil acceso para tus vacaciones e incluso tus gastos corrientes a través de la tarjeta de crédito. Las personas con mucha libertad financiera conocen los peligros ocultos de la deuda.
Los millonarios tienen claro que la deuda puede ser un gran instrumento, pero también un lastre si no se usa de forma adecuada.
Por eso mismo siempre harán cuentas del coste real de endeudarse, es decir, lo que terminarán pagando por lo que adquieren con la deuda. Pero sobre todo nunca se endeudarán si no es para adquirir un activo, algo que sea capaz de generar valor en el medio o largo plazo.
Para que lo entiendas mejor, no pedirán un préstamo para unas vacaciones, pero sí para invertir en una empresa o para poner en marcha un negocio. En definitiva, para generar ingresos ahora o en el futuro. Esa es precisamente la diferencia entre deuda mala y deuda buena.
💸 Igual que existen unos hábitos de los millonarios, también los hay de quienes no tienen deuda. Aquí puedes ver los hábitos de la gente sin deudas.
Tienen muy claro el valor real del dinero
La mente de los millonarios no es diferente de la tuya, pero sí la forma en la que perciben el dinero y su valor real. Para ellos el dinero es una herramienta que tienen un valor determinado y saben lo que cuesta conseguirlo porque muchos de ellos no siempre fueron ricos.
Un ejemplo muy claro es el de Sam Walton, fundador de Wall Mart y apasionado de las avionetas. Pese a juntar una fortuna nunca compró un modelo nuevo, siempre los adquiría de segunda mano porque consideraba que la relación valor-precio era mejor.
😮 Aquí puedes ver un truco para tenerlo tú también tan claro: El truco de medir el precio en horas de trabajo.
Piensan, pero también actúan
“La vida es aquello que pasa mientras hacemos planes para el futuro” decía John Lehnon. La mayoría de personas hará buena esta afirmación y el mundo de la inversión es el mejor ejemplo. El ahorrador promedio preferirá no hacer nada con su dinero a la espera de tener toda la información en su mano, esperar el momento perfecto, la inversión perfecta…
Las personas con libertad financiera saben que tan importante como planificar y diseñar una estrategia es ponerla en marcha, dar ese primer paso que siempre es el que más cuesta. En el terreno inversor, puede que no tengan toda la información o no estén 100% seguros, pero aun así actuarán y se pondrán en marcha.
Tienen objetivos claros
Los millonarios son más decididos no sólo porque cuenten con los recursos para poner en marcha sus ideas, sino precisamente porque son capaces de fijarse metas. El 80% de las personas más ricas se centran en un único objetivo para conseguir sus propósitos.
Este hábito de los millonarios les permite centrarse en sus metas y evitar distracciones.
Sueñan a lo grande
Esta de la las características en común de los millonarios que el autor Tom Corley descubrió después de pasar 5 años entrevistando personas con un gran patrimonio.
Puestos a establecer objetivos, uno de los hábitos de los ricos es pensar a lo grande. La mente de un millonario no espera crear una empresa que funcione, confía en crear un líder mundial que genere millones.
Dedican tiempo y recursos a formarse
Las personas con libertad financiera son conscientes de la importancia de la formación y del aprendizaje continuo. Puede ser haciendo cursos o dedicando media hora al día a la lectura, pero si algo tienen en común todas estas personas es que nunca dejan de aprender.
Esto les permite tener una visión diferente y ampliar sus horizontes de forma constante. Entre los efectos positivos del aprendizaje continuo figura el dar nuevos puntos de vista.
De hecho, una de las cosas que todos los ricos tienen en común es que están en constante aprendizaje. Tanto es así que un 49% de los entrevistados por Corley dedica todos los días un rato a aprender nuevas palabras y un 51% a aprender algún nuevo deporte.
Escuchan más de lo que hablan
Todo el mundo quiere oír lo que tiene que decir un millonario, pero las personas con mucha libertad financiera prefieren escuchar que hablar.
De hecho, este es uno de los hábitos de los millonarios que más se repite. Hasta un 81% de los encuestados por Corley buscaban opiniones de forma constante en su día a día.
😎 Una estrategia de escucha que Corley menciona el su libro es la regla 5:1 según la cual hay que escuchar 5 minutos por cada minuto que se habla.
Piensan a largo plazo
La mayoría de personas buscan fórmulas de gratificación inmediata bien para tapar carencias emocionales o porque simplemente el hombre no está diseñado para pensar a largo plazo. Los millonarios sí que lo hacen.
Tienen la paciencia necesaria para saber esperar para recoger los frutos de su trabajo y saben forzarse a pensar en marcos temporales amplios. Esto les permite ver la imagen global y tener más perspectiva para tomar mejores decisiones.
Un buen ejemplo es la deuda. Cuando una persona estudia una hipoteca lo normal es que se fije en la cuota que va a pagar. Una persona con libertad financiera es capaz de ir más allá, tener en cuenta todas las variables del préstamo (cuota, tipo de interés, cantidad a financiar y cantidad total a pagar) para centrarse en el elemento clave: cuánto costará la casa al final del préstamo, que puede ser el doble del precio inicial.
Cuentan con personas que les ayudan
Las personas con libertad financiera y especialmente las grandes fortunas son conscientes de sus limitaciones y por eso se rodean de personas capaces de ayudarles. U
En el ámbito de gestión financiera esto se traduce en un asesor financiero que les acompañe y les ayude a obtener más rentabilidad por su dinero.
En el curso gratuito Libertad Financiera te ayudaremos a cambiar tu mentalidad y adquirir los hábitos de la gente con mucha libertad financiera para que puedas cumplir tus sueños.