Llega el verano e irremediablemente toca pensar en las vacaciones. Ese remanso de tranquilidad, descanso y ocio por el que trabajamos el resto del año. Una suerte de merecida recompensa.
Quien más y quien menos, tiene en mente uno o varios destinos que visitar este año y hará lo que sea por poder cumplir con sus planes. Ese deseo de exprimir al máximo el verano es totalmente lícito, pero también puede ser muy peligroso si se actúa con premura.
Si hay una máxima en la gestión financiera es que toda acción tiene sus consecuencias y que las decisiones terminan pagándose tarde o temprano, al igual que los errores que cometes en la veintena pueden condicionar tu futuro financiero.
Estos son los cinco errores financieros que los españoles cometen al planificar sus vacariones y que puedes evitar.
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Endeudarte
En esta época verás florecer ofertas de financiación para las vacaciones. Facilidades para devolver el dinero y tipos de interés aparentemente atractivos. Si algo tienes que tener claro es que no debes pedir un préstamo para pagar tu viaje estival.
En ocasiones anteriores ya hemos hablado de los peligros de la deuda, empezando porque es muy fácil que termines gastando más de lo que pensabas en tus vacaciones (y según la ciencia, gastar más en vacaciones no te hará más feliz). Además, pagarás por ellas un dinero de más, exactamente el dinero que se quedará el banco y del que no podrás presentar nada para el futuro salvo tus recuerdos.
La deuda es una herramienta peligrosa que es mejor dejar para cuestiones muy concretas como comprar una casa o, en cualquier caso, adquirir activos que puedan ayudarte a lograr la libertad financiera.
Si todavía no lo tienes claro, vamos a hacer números. Por un préstamo rápido de 1.000 euros te pedirán un tipo del 22% y terminarás dejándote cerca de 500 euros sólo en intereses.
Esta misma práctica se puede aplicar a financiar tu viaje con la tarjeta de crédito, aunque sí que es recomendable que pagues con ella. ¿Suena contradictorio? Dos puntos más abajo lo explicamos para que lo entiendas mejor.
Dejarte llevar por las ofertas de financiación al 0%
Es la alternativa que te ofrecerán muchas agencias de viajes: financiación gratuita. ¿Cómo vas a decir que no si no vas a pagar intereses?
En este artículo te desvelamos lo que hay detrás de la financiación gratuita y qué debes valorar antes de firmar cualquier documento.
No comparar
La tecnología ha avanzado mucho y hoy en día hay comparadores para todo. Aprovéchalos para obtener las mejores ofertas y conseguir un viaje mejor del que habías pensado a un precio más económicos.
Tienes comparadores de hoteles, vuelos, paquetes turísticos… Kayak, TripAdvisor o Minube son algunos ejemplos.
No contratar con tu tarjeta de crédito
Cualquier viaje que contrates deberías hacerlo con tu tarjeta de crédito. El motivo es que cuenta con una serie de seguros integrados que te serán muy útiles. Estos son los más habituales:
- Seguro de viaje. Te permitirá recuperar el dinero en caso de que no puedas viajar por alguna urgencia médica.
- Seguro de asistencia en viaje. Te ayudará si tienes cualquier percance médico en tu destino y dependiendo de la tarjeta puede incluso reparar parte del equipaje que haya perdido la aerolínea.
Antes de pagar el viaje con la tarjeta, asegúrate de que tu método de pago no genera intereses. Es decir, que usas el método de pago aplazado para que te cobren el total de la deuda el día de vencimiento que tengas establecido. Si tienes dudas, consulta con tu banco o con el emisor de la tarjeta pero no te quedes con dudas.
Además, asegúrate de tener el dinero en la cuenta cuando la tarjeta te gire los gastos, porque de lo contrario pueden generarse intereses superiores al 12% y muchos gastos de gestión.
No calcular bien los gastos
Es normal que las ganas por poder ir al destino que tenemos en mente nos hagan infravalorar los gastos que tendremos que soportar allí. Es habitual que tu presupuesto se vea desbordado en el destino entre comidas, cenas y ocio en general.
Para empezar, infórmate de los gastos reales. Páginas como Numbeo pueden ayudarte.
Si pese a todo quieres estar más seguro, hay dos trucos que te ayudarán a mantener el presupuesto de vacaciones bajo control:
Suma un 15% adicional a tu primera estimación y comprueba si todavía estás dentro de presupuesto.
Usa el método de los sobres. De forma resumida, mete el dinero que quieras gastar en un sobre y cuando se termine, se terminó.
No te olvides de repasar nuestra Guía para ahorrar en viajes.