La Navidad está a la vuelta de la esquina y quien más y quien menos ya está pensando en regalos, cenas, adornos… Con el espíritu navideño de telón de fondo, estamos ante una de las épocas más consumistas del año y en la que es más fácil gastar de más.
Para muchas personas la Navidad es como su pequeña boda o comunión anual, un momento para celebrar a lo grande con la familia y amigos y olvidar las estrecheces del resto del año. Pero como ocurre con los enlaces matrimoniales, todo eso tiene un coste que no todos los españoles han planificado adecuadamente. Según un estudio de Deloite los españoles nos gastaremos una media de 684 euros en Navidad este año, el quinto presupuesto más alto de Europa y un 9,6% más que en 2014.
De ese capital, un 39,3% irá a parar a regalos, un 12% más que el año anterior. La comida se llevará un 30,4% o 208 euros, un 0,4% menos, en tanto que ocio y viajes sumarán 83 y 124 euros respectivamente. La de desplazamientos es el área que más crece con un aumento del 25,2% espoleados por la percepción de los hogares de la mejora de la situación económica. Y sin embargo, un informe de Kelisto apunta a que un 12,1% tendrá que financiar su Navidad de una u otra forma. El comparador es más cauto en sus previsiones y establece en 530 euros el umbral de gasto.
En Preahorro ya te hemos hablado anteriormente de los tres grandes peligros de la deuda, empezando por su capacidad para convertirte en su esclavo y terminando porque al final pagas mucho más por los intereses. En este caso habría que añadir uno más: los impagos son más habituales en préstamos de pequeña cuantía.
En primer lugar porque es más fácil pedir y conseguir un préstamo por 500 euros que por 5.000. De hecho, hay compañías como Ok Money o Kredito24 donde puedes lograr el dinero casi al instante y sin papeleo. Accesibilidad a financiación y mora suelen ir de la mano, de manera que cuanta más gente puede acceder a un préstamo, más fácil es que aumente el porcentaje de impagados.
En segundo porque este tipo de financiación rápida más enfocada a ocio y gastos accesorios es también la última de la lista en pagar. En caso de un problema coyuntural es más fácil que sigas pagando la hipoteca pese a que sería más fácil negociar con el banco a que vuelques tus esfuerzos en un préstamo rápido. Y en tercer lugar, que al tratarse de cantidades pequeñas es fácil pensar que podrás pagarlas al siguiente mes y que así permitas que la bola siga creciendo.
El problema en estos casos suele ser el tipo de interés que terminas asumiendo por el impago y que se suma a un TAE ya bastante alto por sí mismo. Desde El Mundo han elaborado una noticia y un gráfico que recoge el coste de financiar tu Navidad según el producto que utilices, desde préstamos personales hasta créditos rápidos pasando por tarjetas de crédito.
Fuente: ElMundo.es
ÍNDICE
Como has podido ver existen diferentes fórmulas para financiar la Navidad y cada una tiene un coste específico en términos de intereses que terminarás pagando. Además, todas incluyen otros peligros adicionales que merece la pena que valores.
Comprar a plazo en la tienda
Estamos ante el famoso “compra y paga en 12 meses sin intereses”. Efectivamente la superficie no cobrará intereses, pero sí puede incluir los gastos de formalización del préstamo. En esta línea, de Carrefour, ofrece financiación gratuita para gastos entre 200 y 2.000 euros a 12 meses.
En este caso no pagarás intereses, pero sí es más fácil que gastes más de lo que querías. La ‘magia’ está en que tu cerebro verá 50 euros al mes en lugar de 600 euros al comprar los regalos de Navidad, por poner un ejemplo.
No todas las tiendas aplican la máxima de “sin intereses”. Muchas te adelantarán el dinero, pero incluirán el pago de intereses o, por lo menos, los gastos de constitución del préstamo. En este caso el resultado será muy similar al de un préstamo personal al uso. Aquí puedes ver cómo funcionan y dónde está el truco de verdad.
Préstamos rápidos
Los préstamos express son una de las alternativas más habituales. La facilidad para lograr el dinero sin papeleo y sin esperas juegan a su favor en estos casos. Piensa que si necesitas formalizar esta operación con el banco tendrían que derivarla a su departamento de riesgos y que aquí todo se firma en cuestión de horas. Antes de un día puedes tener el ingreso en tu cuenta.
Como contrapartida, un TAE que puede superar fácilmente el 1.000% y llegar al 5.000% dependiendo del plazo del préstamo. Para que te hagas una idea, por un crédito de 600 euros a 30 días puedes pagar 180 euros en concepto de intereses. Lo único positivo es que, por lo menos, las cantidades que puedes pedir no superan los 700 euros, así que el daño está limitado.
Aquí puedes ver las trampas de los préstamos rápidos.
Tarjetas de crédito
Esta es la fórmula más habitual de financiar las Navidades, a veces incluso de forma involuntaria. En este artículo te explicamos cómo funcionan las tarjetas de crédito, que pueden cobrar entre un 12% y un 20% de intereses por financiarte.
Hay muchas personas que terminarán pagando estas fiestas a crédito sin querer. Si cuando llega el momento de pagar no hay dinero en la cuenta, se activará el crédito con tipos que alcanzarán fácilmente el mencionado 20%.
Además de acostumbrarte a usar la tarjeta de débito en lugar del crédito, si vas a tener una de las segundas debes elegir bien una que no cobre muchos intereses y que, a ser posible, incluya descuentos por tus compras.
Préstamos personales
Es poco habitual pedir préstamos personales para cantidades inferiores a 1.000 euros y muchas entidades exigirán que solicites incluso más dinero. El tipo de interés en este caso ronda el 10%, aunque hay entidades donde se puede disparar al 20%.
El problema en este caso es que, de nuevo, puedes terminar gastando mucho más de lo previsto. Ya puestos a pedir 3.000 euros, no pasa nada por sumar 1.000 más y tener ya unas fiestas por todo lo alto o ir a un tres estrellas en lugar de a un dos estrellas esta Noche Vieja.
Por último, también es importante que tengas en cuenta la mencionada posibilidad de impago, que haría que el banco tecobrase intereses y una comisión adicional. Incluso si no pides dinero pero gastas más de lo que tienes en cuenta, la entidad te girará una comisión por descubierto con tipos que pueden alcanzar también el 12%.