Tener coche es necesario para muchas familias, pero también una fuente de gasto. Entrevistamos a Daniel Hernández, del departamento de ventas y atención al cliente de la página de recambios Endado.com para que nos descubra los mejores trucos para ahorrar en el mantenimiento del coche y no gastar de más cuando nos toca acudir al taller. Si necesitas consejo para elegir coche, aquí hacemos números sobre cuál comprar y cómo hacerlo.
¿Cuánto cuesta de media mantener un coche al año?
El mantenimiento de un coche depende de los kilómetros que realicemos al cabo del año, el tipo de conducción y sobre todo de que coche se trate.
Teniendo como referencia un coche común (Seat Ibiza, VW Polo, Ford Fiesta…), con una media de kilometraje de 30.000 km. y con una conducción normal, tendríamos que tener en cuenta que los mantenimientos se realizarían cada 15.000 km. Cada mantenimiento tendría un coste de 150 euros contando mano de obra, serían 300 euros (cambio de aceite y filtros), habría que revisar sistemas de frenado, líquidos del motor, neumáticos, suspensión, dirección… Con lo que si hubiera que cambiar algo más subiría el coste de mantenimiento, de media habría que sumarle entre 100 y 300 euros más por si hubiera que cambiar pastillas de freno, neumáticos o remplazar algún líquido como el refrigerante o de frenos.
¿Cuáles son las piezas que más problemas pueden dar?
Las piezas que más suelen estropearse suelen ser los amortiguadores y embrague, que suelen tener una vida útil de entre 100.000 km y 150.000 km en el caso de los amortiguadores y entre 100.000 y 200.000 km el embrague, aunque en este último hay casos de kilometrajes más altos. Esto depende mucho del modo de conducción del conductor habitual del coche. También tenemos piezas eléctricas, como los motores de arranque y alternadores que en ocasiones nos pueden dar algún problema, pero son piezas que en menor medida suelen romperse.
¿Qué estrategias podemos usar para alargar la vida del coche?
El modo de conducción afecta directamente a la duración de las piezas mecánicas de nuestro vehículo, con una conducción agresiva forzaremos la mecánica y durarán menos todas las piezas, por ello hay varios trucos para poder aumentar la vida útil de nuestro coche y en consecuencia, tener que acudir menos al mecánico.
Al arrancar el coche siempre intenta pisar en pedal de embrague, de este modo, «desconectaremos» la transmisión del motor y evitaremos que esa vibración del arranque afecte al embrague y a la caja de cambios.
Intentar hacer salidas suaves y progresivas, de este modo, además de ahorrar combustible, evitaremos tener holguras en transmisiones y alargas la vida de la caja de cambios y embrague.
Realizar los cambios de marcha en el rango de revoluciones idóneo para el motor, en un diesel suele ser entre 2.200 rpm y 2.700 rpm y en un motor gasolina entre 2.500 y 3.500 rpm. De este modo ahorraremos combustible ya que siempre estaremos en la zona de rpm donde el motor tiene mayor par (fuerza) y no tendremos que pisar a fondo el acelerador para que el coche responda.
No acelerar el coche en frio, el aceite del motor tarda en calentar unos 15 minutos desde que se arranca el coche, no lo confundamos con la temperatura del refrigerante, ya que este se calienta con mayor rapidez. Una vez el aceite este caliente podemos acelerar el coche sin problema, tendremos el motor bien lubricado y el aceite en el punto óptimo de lubricación para que las piezas internas de motor no sufran un desgaste excesivo.
Si hacemos un viaje largo o hemos «dado caña» al coche, nunca apagarlo según aparcamos, es recomendable dejarlo entre 30 segundos y un minuto al relentí para que enfríe el aceite un poco y evitar que este se carbonice por alta temperatura en el turbo o bomba de aceite, lo que provocaría una rotura una vez volvamos a arrancar el coche.
Evitar acelerones y frenazos ya que conseguiríamos un desgaste prematuro en neumáticos, frenos y suspensión además de un alto consumo de combustible.
Si realizamos un viaje largo se recomienda llevar una velocidad constante, lo que nos ayudará a desgastar menos la mecánica y ahorrar combustible.
¿Cuáles son los tres mejores trucos para ahorrar con el coche?
Tener una conducción tranquila o normal, intentar no conducir de forma agresiva ya que desgastamos la mecánica con mayor rapidez además de elevar el consumo de combustible hasta un 50%.
En tema mantenimiento, poner aceite de primera marca y de calidad, acorde con las especificaciones, densidades y calidades que recomiende el fabricante, evitar poner aceites que nos recomienden o que leamos en foros, ya que lo que vamos a provocar son desgastes mayores en el motor y una degradación del aceite prematura, no porque el aceite sea más caro es mejor, ese es un error muy común.
Un consejo que mucha gente suele desconocer y que provoca un desgaste prematuro del embrague, es dejar pisado el pedal de embrague cuando estamos frenando o dejar la primera metida y embrague pisado en el semáforo. Siempre que estemos parados el coche tiene que estar en punto muerto y el pedal de embrague sin pisar.
Y para ahorrar en revisiones y mantenimiento?
Para poder ahorrar algo de dinero en mantenimiento, intentar siempre realizar los cambios en su momento, evitar alargar los cambios y que se acumulen averías, ya que subirá significativamente la factura además que seguramente provoquemos nuevas averías al no solventar las primeras.
Como he dicho antes, muy importante la elección de lubricante correcto sugerido por el fabricante del vehículo e intentar poner piezas y líquidos de primera marca, para asegurarnos su calidad y duración dentro de nuestro motor.
¿Merece la pena acudir siempre al taller oficial?
Personalmente no soy muy partidario de acudir a la casa oficial, debido a su alto coste en la mano de obra y en sus piezas, siendo estas últimas de calidad pareja a marcas genéricas de primera línea. Hay buenos mecánicos que a un coste menor nos pueden realizar los mismos trabajos con la misma calidad y garantía que un servicio oficial. Las piezas las podemos conseguir en Endado.com a un precio muy competitivo y con un buen descuento respecto a la casa oficial.
¿Y al concertado por la compañía del seguro? ¿Es cierto que usan piezas de peor calidad?
Depende de la calidad del taller, en tema de recambios siempre podemos advertir al taller que queremos piezas de primera marca y si no es así que nos informe para poder cambiar de taller. Una cosa que sí ocurre, por norma general, es que los seguros más caros y con mayores coberturas suelen trabajar con mejores talleres e incluso en vez de reparar piezas, te las suelen remplazar por piezas nuevas, pero esto solo suele suceder en los seguros con un precio mayor.
Si compramos un coche de segunda mano, ¿en qué debemos fijarnos para que no nos den «gato por liebre»?
Hay varios puntos a tener en cuenta para que no se convierta en un dolor de cabeza y de bolsillo.
Para poder determinar el kilometraje aproximado del coche hay que fijarse en el estado del volante, palanca de cambios y desgaste de los asientos, siempre y cuando sean los originales son un claro testigo del uso que ha tenido el coche. Coches con mucho kilometraje tendrían estas piezas con un desgaste mayor (volante de cuero pelado, asientos con la tapicería desgastada o palanca de cambios muy rozada).
Debemos probar el embrague. Si está muy duro, denotaría que el cojinete esta en las últimas, si el coche para poder salir tiene que estar el pedal muy arriba, el disco y la maza estarían desgastados o el coche presenta vibraciones, ruido al relentí y al salir en primera marcha, entonces el volante bimasa estaría para cambiar. Esta reparación suele ser cara con lo que habría que cerciorarse bien que esta parte esta lo mejor posible.
Revisar el libro de mantenimiento o pedir facturas de los últimos cambios efectuados al vehículo, para poder corroborar que el mantenimiento se ha ido haciendo según marca el fabricante y se han puesto piezas de calidad.
Observar posibles vibraciones de motor, ruidos metálicos al relenti y sobre todo que el coche suba de revoluciones sin problemas ni tirones.
Por último, revisar el estado general del coche como posibles holguras en sistemas de suspensión y dirección, revisar posibles fugas de aceite por las juntas del motor o del turbo si tuviera, esta parte es importante porque un coche con pérdidas de aceite puede estar escondiendo averías grandes.